Anoche
-9 de octubre-, en el programa televisivo “La Mirada”, conducido por Roberto
García, fue entrevistado el ex Presidente Eduardo Duhalde, quien emitió
interesantes opiniones sobre la situación actual de nuestro país.
Afirmó
que la crisis actual no se podrá superar, mientras no se concreten tres valores
imprescindibles para el funcionamiento eficaz de toda comunidad: orden, control
y respeto.
Al
ser consultado sobre la Vicepresidente, Cristina Fernández, comentó que su
principal problema es que padece de crematomanía,
lo que suscitó sorpresa en el periodista. Sin embargo, analizando el pasado
de quien ejerció la máxima magistratura durante ocho años (dos períodos), parecería
que se trata de un diagnóstico preciso.
Anexo
¿Sabes
qué es la crematomanía?
Hay
personas adictas a comprar, otras adictas al deporte, y también las hay adictas
al dinero. Esta patología se denomina crematomanía, o deseo obsesivo por
acumular dinero y riquezas, y, como todas las demás manías, es difícil de
tratar.
Las
personas que sufren esta patología responden a un perfil muy marcado por el
interés personal y las ansias de reconocimiento social y profesional. Tienden a
anteponer cualquier cosa con tal de aumentar sus riquezas, ya sea familiares,
amigos o valores.
En estos
casos, el dinero se convierte en una vía de escape para aquellas personas que
no se sienten satisfechas con su vida. Se refugian en el dinero para saciar
necesidades que, tal y como ellos piensan, podrán satisfacer con mucho dinero y
que les aportará una posición social por encima de los demás.
Estas
son 10 señales de que se padece esta patología:
No
disfrutan los logros porque siempre les hace falta conseguir más cosas.
Piensan
en el dinero la mayor parte del tiempo.
Asocian
el dinero con la felicidad plena.
Apruebas
o desapruebas a las personas en función de su economía.
Viven
con la necesidad de “ser alguien” en la vida y tener reconocimiento social.
Sienten
insatisfacción con la vida que han conseguido.
Se
quejan de la falta de dinero, a pesar de no necesitarlo.
Sienten
resentimiento hacia las personas que, para ellos, han logrado más en la vida.
Piden
dinero para poder cubrir todos los gastos.
No
realizan actividades que no les vayan a generar ningún beneficio.
(Fuente:
Forbes España, 12-5-2021)